¿Nació Jesús realmente un 25 de diciembre?
La costumbre. Según la tradición, el nacimiento de Jesús tuvo lugar un 25 de diciembre. El Diccionario abreviado Oxford de las religiones del mundo define Navidad como la “fiesta cristiana que conmemora el nacimiento de Jesús, celebrada el 25 de diciembre”.
Sus raíces. “La elección del 25 de diciembre no tiene fundamento en la Biblia —explica The Christmas Encyclopedia—, sino en las fiestas romanas paganas que se celebraban a finales del año”, aproximadamente en la época del solsticio de invierno, cuando los días empiezan a alargarse, en el hemisferio norte. Aquellas fiestas incluían las Saturnales, en honor de Saturno, dios de la agricultura, “y las fiestas combinadas de dos dioses solares, el romano Sol y el persa Mitra”, señala la misma enciclopedia. Estas últimas conmemoraban el nacimiento de ambos dioses y se celebraban el 25 de diciembre, fecha del solsticio de invierno según el calendario juliano.
Aquellas fiestas paganas comenzaron a “cristianizarse” en el año 350, cuando el papa Julio I designó el 25 de diciembre como día del cumpleaños de Jesús. “La Natividad asimiló o suplantó gradualmente todos los demás ritos del solsticio —indica la Encyclopedia of Religion—. La imaginería solar se utilizó cada vez más para representar al Cristo resucitado (a quien también se llamó Sol Invicto), y el viejo disco solar […] se convirtió en el halo de los santos cristianos.”
Lo que dice la Biblia. Las Escrituras no mencionan la fecha del nacimiento de Jesús, pero podemos estar seguros de que no nació un 25 de diciembre. ¿Por qué? La Biblia revela que cuando nació Jesús había pastores que “vivían a campo raso” y cuidaban sus rebaños de noche cerca de Belén (Lucas 2:8). Ahora bien, en octubre solía empezar la estación fría y lluviosa, y para diciembre, el frío se intensificaba e incluso venía acompañado de nevadas. Entonces, los pastores —en especial los de las tierras altas más frías, como las que rodeaban Belén— guardaban sus rebaños en refugios por las noches.
Un hecho significativo es que los primeros cristianos, muchos de los cuales habían acompañado a Jesús en su ministerio, no celebraron su cumpleaños en ninguna fecha. Más bien, en armonía con lo que él les mandó, solo conmemoraron su muerte (Lucas 22:17-20; 1 Corintios 11:23-26).
Los “reyes magos”: ¿cuántos eran y a qué se dedicaban en realidad?
La costumbre. Suele representarse a tres “reyes magos” que llegan desde el Oriente guiados por una “estrella” y ofrecen regalos al niño Jesús en el pesebre de un establo. A veces también aparecen pastores en las escenas.
Sus raíces. Aparte del breve relato de las Escrituras, “todo esto no deja de ser una simple leyenda sin base bíblica alguna, llevada de un lado a otro por la tradición”, señala el Comentario exegético al texto griego del Nuevo Testamento.
Lo que dice la Biblia. La Biblia no dice cuántos eran. Puede que fueran dos, tres, cuatro o más. La palabra para designarlos en el idioma original es mágoi, y no significa reyes, sino astrólogos o hechiceros. Debido al largo viaje que hicieron desde el Oriente, los astrólogos no pudieron llegar a tiempo de visitar a Jesús en el establo. Más bien, después de quizás meses de viaje, “entraron en la casa” donde vivía. Allí vieron “al niñito con María su madre” (Mateo 2:11).
¿Qué tipo de estrella condujo a los astrólogos?
Podemos hacernos una idea pensando en lo que la estrella hizo. Por una parte, no llevó a los hombres directo a Belén, sino a Jerusalén, donde sus preguntas sobre Jesús llegaron a oídos del rey Herodes. El rey “mandó llamar secretamente a los astrólogos”, quienes le hablaron del recién nacido “rey de los judíos”. Herodes entonces les dijo: “Hagan una búsqueda cuidadosa del niñito, y cuando lo hayan hallado vuelvan e infórmenme”. No obstante, el interés de Herodes en Jesús no era bienintencionado, ni mucho menos. En realidad, aquel gobernante orgulloso y despiadado estaba decidido a acabar con Jesús (Mateo 2:1-8, 16).
Curiosamente, la “estrella” condujo después a los astrólogos hacia el sur hasta Belén y, una vez allí, “se detuvo” sobre la casa donde estaba Jesús (Mateo 2:9, 10).
¿Qué tiene que ver Santa Claus con Jesús y con su nacimiento?
La costumbre. En muchos países se considera que Santa Claus es el que trae regalos a los niños. Los pequeños suelen escribirle para pedirle regalos que, según la tradición, fábrica con la ayuda de unos duendes en su cuartel general en el Polo Norte.
Las raíces. Según la costumbre popular, el mito de Santa Claus debe su origen a San Nicolás, arzobispo de Mira, ciudad de Asia Menor (la actual Turquía). Según el Diccionario de los santos, “las noticias sobre su vida son escasas y llenas de elementos legendarios”. Santa Claus es, al parecer, una abreviatura del nombre latino Sanctus Nicolaus.
Desde Sorti – Faggiano les deseamos una muy Feliz Navidad.